Una de las consultas más habituales que nos hacen en Fidelitis es si es imprescindible contar con un perito médico en un juicio de incapacidad permanente. También es motivo frecuente de duda qué diferencias hay entre un perito médico y un médico forense, y cuál de sus informes resulta más favorable. En este artículo vamos a contarte todo lo que debes saber para que tu demanda de incapacidad llegue a buen puerto.
¿EN QUÉ CONSISTE EL TRABAJO DE UN PERITO MÉDICO DE INCAPACIDAD?
Un perito médico es un experto legislación médica cuyas principales atribuciones son el análisis de la documentación médica y la valoración del daño corporal. Su cometido, pues, consiste en evaluar las patologías e interpretar los baremos, así como en ilustrar a los jueces sobre asuntos médicos difíciles de interpretar para alguien profano en la materia y ayudarles a la hora de emitir su veredicto. Están obligados a actuar con objetividad, independencia e imparcialidad.
El perito médico especializado en incapacidad permanente se encarga de analizar las lesiones, daños o secuelas derivadas de una enfermedad común o profesional, de un accidente laboral o un accidente de tráfico, negligencia médica o problema de salud mental que suponga importantes limitaciones anatómicas y funcionales para el paciente. Mediante el diagnóstico de su patología, y con el adecuado soporte documental basado en su historial clínico, determinará si se trata de una situación temporal y reversible o de una condición de salud permanente merecedora de un grado de incapacidad.
A tal fin realizará un minucioso estudio empleando todas las técnicas e instrumentos a su alcance (diagnósticos, pruebas médicas, informes médicos en clínicas públicas o privadas, etc.) que luego se verán reflejadas en un informe pericial.
El perito médico también podrá emitir un pronóstico, detectar una acción terapéutica o identificar una posible responsabilidad civil o profesional, calculando el valor económico de una indemnización.
INFORME PERICIAL MÉDICO DE INCAPACIDAD PERMANENTE
Entre las funciones del perito médico judicial, la fundamental es la elaboración del informe pericial, en el que recogerá los argumentos y valoración de cada caso. Para ello analizará toda la documentación disponible e intentará determinar la relación de causalidad. Cuando en dicho informe también incluya su opinión, se considerará un dictamen pericial.
Para determinar el grado de incapacidad que presenta un trabajador deberá ser sometido a un peritaje médico. El objetivo es la elaboración de un informe pericial de incapacidad permanente en el quede reflejada una valoración imparcial y transparente de su estado de salud, y su consecuente grado de afectación funcional o menoscabo. Mediante esta prueba pericial de incapacidad permanente se deberá probar la disminución o anulación de la capacidad para trabajar del demandante.
Hay que dejar claro que el informe pericial no debe presentarse en la fase administrativa de un proceso de incapacidad, ni en la solicitud ni en la posible reclamación previa (el Tribunal Médico no lo tiene en cuenta en sus evaluaciones); por lo tanto, sólo está justificado en la vía judicial.
¿QUÉ DIFERENCIAS HAY ENTRE UN PERITO MÉDICO Y UN MÉDICO FORENSE?
El perito médico puede ser contratado tanto por la parte demandante como por la demandada, mientras que el médico forense trabaja para la Administración de Justicia e interviene en los juicios en calidad de perito únicamente cuando es reclamado por el juez.
El perito forense también puede emitir informes y dictámenes médico legales que le sean solicitados por los Juzgados, Tribunales, Fiscalías, Oficinas del Registro Civil y otros órganos de la Administración de Justicia, pero no puede formar parte de la representación legal de ninguna de las dos partes implicadas.
Otra diferencia radica en la naturaleza de sus informes. En tanto que el informe pericial médico necesita ratificación por parte del perito médico durante la celebración del juicio, en el caso del informe médico forense no es necesario, ya que está elaborado por un médico forense adscrito al Instituto de Medicina Legal.
Y lo más importante y con lo que deberías quedarte: el informe del forense sólo se limita a tomar nota de las lesiones y los días de baja tras revisión rutinaria de los documentos médicos presentados, pero no acredita las secuelas, algo básico en un juicio por incapacidad permanente.
ENTONCES, ¿NECESITO UN PERITO MÉDICO EN UN JUICIO DE INCAPACIDAD?
Si vas a acudir a los tribunales, e incluso antes de dar ese paso, en Fidelitis te recomendamos contar con un abogado especialista en incapacidad permanente que te asesore durante todo el proceso. Y si quieres tener las máximas garantías de que te van a conceder el grado de incapacidad reclamado, nuestro consejo es que tengas un perito médico trabajando codo con codo con tu abogado, de manera que tu defensa sea lo más sólida posible.
Aquí puedes ver la actuación del perito médico en un vídeo de un caso real de un juicio contra el INSS por incapacidad, cómo, por medio de su informe pericial, describe las patologías, secuelas y el agravamiento del demandante y rebate los argumentos de la abogada de la Seguridad Social.
En Fidelitis ponemos a tu disposición a los mejores peritos médicos judiciales expertos en incapacidad laboral, con probada experiencia y alto índice de éxito, y además te ofrecemos un estudio de viabilidad totalmente gratis donde te informaremos de si es viable la elaboración de un informe pericial destinado a la obtención de la incapacidad permanente. Y recuerda: sólo cobramos si ganamos.